Actividades como trabajos en altura, espacios confinados, trabajos con electricidad o manejo de sustancias químicas peligrosas requieren la emisión de permisos especiales antes de que puedan realizarse.
En el caso de tareas de alto riesgo o actividades particularmente peligrosas, se deben implementar permisos de trabajo antes de que los contratistas puedan comenzar las actividades. Estos permisos aseguran que todos los controles de seguridad están en su lugar y que es seguro proceder con la tarea.
Antes de iniciar la tarea, un supervisor debe realizar una inspección para verificar que se han implementado las medidas de seguridad necesarias, y luego emitir un permiso de trabajo formal. Este documento debe incluir detalles sobre la tarea, los trabajadores involucrados, los riesgos identificados y las medidas de control aplicadas.
Una vez que la tarea se haya completado, el permiso debe ser revisado y cerrado por el supervisor para asegurar que el área de trabajo quede segura y libre de riesgos residuales.
Los permisos de trabajo garantizan que se tomen todas las precauciones necesarias para las actividades de alto riesgo, protegiendo tanto a los contratistas como a los trabajadores en general, y asegurando que las tareas se realicen de manera controlada.
Estos elementos son fundamentales para establecer un entorno laboral seguro y asegurar el cumplimiento de las normativas vigentes. Su implementación efectiva ayuda a minimizar los riesgos asociados a las actividades laborales, especialmente cuando los contratistas están involucrados en tareas de alto riesgo. Al seguir estos procedimientos, la empresa garantiza que los contratistas operen bajo los mismos estándares de seguridad que sus empleados directos, promoviendo una cultura de seguridad compartida.