Después de una amputación, es importante
tener músculos firmes, evitar exceso de
grasa, mantener huesos fuertes y una buena
circulación. La alimentación y actividad
física desempeñan un papel clave, además, es
fundamental prevenir complicaciones durante
la rehabilitación, manteniendo un peso
adecuado.
Prevenir cambios en el peso es una
tarea importante para los cuidadores y
pacientes a su cargo.